
«El camino por el que llegamos a Cristo es la Escritura, por la cual marchan los que la entienden tal como es»
— San Isidoro de Sevilla, Sentencias I, 18.1
Introducción
Con una brevedad aforística, Isidoro condensa aquí su convicción acerca de la función normativa y pedagógica de la Escritura. La frase sirve como pórtico para reflexionar sobre cuatro ejes inseparables: (1) el trasfondo textual-crítico de la sentencia, (2) su contexto histórico-eclesial, (3) la hermenéutica que subyace a la expresión «tal como es» y (4) su relevancia para la teología reformada contemporánea.
1. Notas textuales y filológicas
El texto latino conservado en la edición crítica de Codoñer (2019) reza: *«Via per quam itur ad Christum Scriptura est, per quam eunt qui ita eam intellegunt sicut est.»*
- Léxico clave.
- Via… itur ad Christum: La metáfora vial alude a Juan 14:6 («Yo soy el camino…»), subrayando que la Escritura no sustituye a Cristo, sino lo media sacramentalmente en el sentido amplio agustiniano.
- intellegunt sicut est: Isidoro desliza un principio exegético: sólo quien capta la Escritura in ipsa veritate—sin imponerle distorsiones alegóricas arbitrarias—progresa hacia Cristo.
- Variantes menores. Algunos códices visigóticos sustituyen sicut por qualiter, sin alterar el sentido principal: la fidelidad a la forma original del texto. Que Isidoro enfatice la intelegentia indica la prioridad de la lectura en comunidad y no meramente privada—un punto crucial frente a las herejías que él combate.
2. Contexto histórico-eclesial
Isidoro (c. 560-636) escribe las Sentencias en la Hispania visigoda, cuando la iglesia acaba de unirse doctrinalmente al catolicismo niceno tras la conversión de Recaredo (589). Dos inquietudes dominan su producción:
- Unificar la formación clerical: la falta de bibliotecas y de instrucción bíblica exigía compendios accesibles.
- Blindar la ortodoxia: el arrianismo residual y el priscilianismo obligaron a insistir en una exégesis controlada por la regula fidei.
En ese cuadro, la sentencia funciona como antídoto contra interpretaciones gnósticas o excesivamente alegóricas; invita a una lectura humilde, literal-espiritual, que conduce a la persona viva de Cristo.
3. Exégesis teológica de la sentencia
Elemento | Explicación | Paralelos bíblicos |
---|---|---|
Camino | Metáfora del proceso redentor; la Escritura es medio para un fin | Sal 119:105; Lc 24:27 |
Llegamos a Cristo | Conocimiento salvífico, no mera información | Jn 5:39-40; 2 Tim 3:15 |
La entienden tal como es | Llamado a la lectio que respeta el sentido gramatical-histórico y se deja iluminar por el Espíritu | 1 Co 2:12-13; 2 Pe 1:20-21 |
Isidoro armoniza aquí los dos niveles de lectura heredados de Agustín (literal y espiritual) evitando el subjetivismo: la Escritura posee un ser (sicut est) que debe ser escuchado antes de ser aplicado. El intérprete avanza hacia Cristo en la medida en que renuncia a domesticar el texto.
4. Proyección reformada
- Sola Scriptura. La sentencia visigoda anticipa el lema reformado: la Escritura es «la única regla infalible de fe y práctica».
- Autorreferencialidad bíblica. Para Isidoro, la Escritura se explica a sí misma (Scriptura sui ipsius interpres), eco temprano de la doctrina reformada de la claridad interna de la Escritura.
- Epistemología cristocéntrica. El conocimiento verdadero es imposible sin la presuposición de Cristo revelado; la Escritura sirve de punto de partida y norma para toda disciplina (Col 2:3).
- Implicaciones pastorales. En consejería bíblica—área que el usuario cultiva—la autoridad final recae sobre el texto recibido y correctamente entendido; sólo así se provee «medicina y nutrición espiritual» para toda la comunidad del pacto, retomando otras afirmaciones isidorianas (Sent. I, 16.8).
Recepción eclesial y cultural
En los concilios toledanos posteriores (633, 636), la insistencia en la formación bíblica del clero refleja la influencia directa de Isidoro. Su Camino devino un programa:
- Educación ministerial: la Regula Monachorum de Isidoro prescribe la lectura diaria de la Biblia como disciplina fundante.
- Liturgia hispánica: las lecturas del Liber Comicus se estructuran para narrar la historia de la salvación y la santificación, guiando al pueblo «en marcha» hacia Cristo por la lectura y exposición de la Escritura.
Así, la frase es más que teoría; es paradigma cultural de un Occidente que aprende a leer el mundo con ojos bíblicos.
Conclusión
Isidoro nos recuerda que la Escritura no es un archivo muerto ni mero soporte de dogmas, sino senda viva que, correctamente transitada, introduce en la comunión con Cristo. Su advertencia «tal como es» desafía tanto a los lectores pre-críticos—tentados de alegoría vacía—como a los lectores hipercientíficos—tentados de reducir el texto a fenómeno histórico sin voz presente. La hermenéutica fiel, inseparable de la doxología y la obediencia, encuentra en la Escritura la via por excelencia. Andar en ella es escuchar, creer y obedecer al Señor que allí se revela.